La Junta de Andalucía pretende volver a negociar el futuro de las Reales Atarazanas de Sevilla a pesar de un reciente acuerdo con la Asociación para la Defensa del Patrimonio Histórico (ADEPA). Un jarro de agua fría que dejaría en papel mojado el compromiso para la rehabilitación del edificio. Fueron declaradas Bien de Interés Cultural (BIC) y catalogadas como Monumento Nacional en 1969. Desde 1993 la propiedad es de la Junta de Andalucía, que cedió el edificio a La Caixa, por un periodo de 75 años.