Me pregunto si la ciencia contemporánea, o al menos buena parte de la comunidad científica, no estará cometiendo un error de partida al dar por evidente que sólo existe una realidad: la natural; únicamente existiría aquello que puede ser pesado y medido. Sin embargo, y de ahí mi perplejidad, nunca se ha demostrado tal evidencia con el fútil argumento de que es una evidencia.

Dicho de otra manera: para el científico rudamente materialista sólo es real lo comprobable con los instrumentos de la ciencia, de manera que lo no comprobable no es que esté por comprobar sino que no existe ni puede existir. Así, por definición -no por comprobación- lo sobrenatural (supernatural, más allá de lo natural) no es real. Así, a lo peor estamos negando la mitad de lo existente. Sería un desastre, aunque explicaría muchas cosas del mundo actual.

El 10 de noviembre de 1929 se reunió en casa de la pintora Borel un grupo de físicos y de filósofos. Albert Einstein hablaba sobre la búsqueda de una fuerza unificadora del universo cuando Paul Valéry le interrumpió: “¿Cuál es la probabilidad de que exista esa unidad de la naturaleza?” Respuesta de Einstein: “Es una cuestión de fe”. ¡Genial!