En el corazón resuena
fervor que al temor espanta,
ya llega Semana Santa
y el amor, puede a la pena.
Es una semana llena,
y en los tres primeros días
con sus milagros decía
que era el Dios vivo que andaba
entre los hombres que amaba,
y su verdad no era ajena.
En eucaristía plena,
el Padre Nuestro enseñó
el pan lo partió y lo dió,
jueves fue La Última Cena.
La traición, malvada hiena
y el viernes, crucifixión,
el sábado es la aflicción
Ay de la Virgen María!
y el domingo de alegría:
Día de Resurrección!
Vivir en Cristo es opción
que te convierte en cristiano
que hace al prójimo tu hermano,
y te arma de tesón.
Nunca más serás peón
de lo cruel y la maldad
crecido en gran cantidad
de cariño y bendiciones
y armado con los cañones
de justicia y de verdad.