El 20 de marzo de 1936 nació en Madrid María de los Ángeles López Segovia, que pasaría a la historia de la mejor escena española con el nombre de Lina Morgan.
Recordarla en estos momentos es como seguir al pie de la letra que se haya dicho tantas veces que no hay nada más serio que el humor y cuánto lo necesitamos en la vida. Porque Lina Morgan fue la máxima estrella femenina de la comicidad en España. Nadie igualó sus niveles teatrales y televisivos de llenos absolutos y de índices de audiencia, dominando también las taquillas por sus películas.
Lina Morgan ganó su inmortalidad a lo largo de sus éxitos teatrales, clásicos además en su propio Teatro de La Latina, como “¡Vaya par de gemelas!”, “Sí al amor”, “El último tranvía” y “Celeste no es un color”. En el cine quedó para siempre inseparable de su papel en “La tonta del bote”. Y en la televisión fue millonaria en espectadores gracias a su inolvidable serie “Hostal Royal Manzanares”.
Entre muchas distinciones se le concedieron el Premio Ondas, la Medalla de Oro de las Bellas Artes y la Gran Cruz de la Orden Civil de Alfonso X El Sabio.
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